lunes, 11 de enero de 2010


Queridos hermanos, hoy he querido retomar nuevamente el escribir para todas aquellas que me seguían y las que no también, de modo que en vista de mi desactivación durante un tiempo he querido retomar el estar en contacto con ustedes, pero esta vez con un tema súper interesante el cual nos envuelve y nos perjudica a diario en nuestros que áceres diario, pero que de igual forma muchas veces nosotros también hemos sido protagonistas y es nada mas y nada menos que la MENTIRA. Por tanto, esta actitud que una forma compulsiva de no decir la verdad de un hecho o de una acción en el entorno que nos movemos, volviéndose una actitud normal hasta el punto de ser el medio mas frecuente en nuestra comunicación. Hasta el punto de colarse y ser un habito personal para ser utilizado en una falsa normalidad de nuestras vidas intentando muchas veces llenar vacios que nunca se podidos llenar por frustraciones o metas inconclusas.



Ahora bien, si no logramos reprimir esta actitud en nuestras vidas nunca lograremos comunicarnos de manera sincera y creíble a los ojos de los demás. Trayendo como a consecuencia el muchas veces intentar comunicarnos con la verdad pues lo amerita siendo nuestro esfuerzo innecesario, pues nadie nos creerá. En fin, estas pequeñas palabras no son para condenar ni abandonar una persona con esta conducta de gustarle mentir dañando muchas veces la reputación de otras personas sin ser necesario, pero lo peor del caso no es eso lo peor que el mismo se las cree, sino mas bien ayudar a este individuo haciéndole ver que su vida funcionaria mejor sin el engaño a los demás incitándolo a muchas veces a lograr superar momentos de frustraciones o de vacios en su vida, ya que en la mayoría de los casos este vicio son por conductas aprendidas en sus mismo hogares

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